Creditos:Tesla | Benj Edwards
Por: Aracelys Otero Torres / Relacionista Lic R53
Un nuevo robot humanoide creado por Tesla acaparó la atención de miles de personas quienes participaron en la actividad denominada We, Robot. Se trata de Optimus. Descrito por Elon Musk como “el producto más grande jamás creado”, se espera que revolucione la vida doméstica y empresarial. Musk, adelantó que el producto estará disponible en el mercado en los próximos años por un precio aproximado de $20,000 a $30,000 por unidad. Además, se espera que los mismos sean parte de los hogares a través del mundo.
Entre los avances de Optimus se encuentra su capacidad para agarrar objetos pequeños, desplazarse de forma más natural y el alcanzar mayor autonomía. Optimus también puede comunicarse en tiempo real. Durante la presentación, esta nueva generación de robots bailaron, sirvieron bebidas y conversaron. También este nuevo robot puede autorecargarse y desplazarse hasta el lugar para estos fines. Todas estas funciones son posibles mediante la integración de la inteligencia artificial (IA), entre otras tecnologías.
En los vídeos compartidos a través de diferentes plataformas digitales vemos como Optimus se encuentra en una casa y realiza tareas del hogar. Regar las plantas, doblar ropa, servir bebidas o alimentos, eliminar el polvo o sucio de superficies son algunas de las tareas que realiza con facilidad. Otras tareas que el robot puede llevar a cabo incluyen pasear a las mascotas y recoger la correspondencia.
Aunque toda lo descrito me parece una excelente oportunidad para tener dos en mi casa y que se conviertan en mis asistentes, surgen diferentes opiniones sobre cómo la presencia de un robot en el hogar alteraría la vida cotidiana del mismo. En mi opinión, lo primero que se debe entender es que un robot es precisamente eso un robot, que en nada sustituye a los humanos. Hay que verlos como un facilitador en la realización de las tareas a nivel personal como profesional. Es una herramienta que colabora con los seres humanos.
Imagine una persona que vive sola y que tenga algún grado de diversidad funcional. Sin duda, el contar con la ayuda de Optimus sería de gran beneficio. Además de las tareas del hogar que el robot realiza este brindaría compañía y por ende contribuiría a minimizar el sentimiento de soledad que experimentan muchos adultos mayores. De igual forma libera la carga de responsabilidades que conlleva mantener un hogar, tiempo que las personas pueden utilizar para tener calidad de vida, compartir con sus familiares y realizar actividades de esparcimiento, entre otros.
Los robots humanoides al igual que la inteligencia artificial son herramientas que nos ayudan en el día a día y que se encuentran en constante evolución. El uso correcto de las mismas, facilita las tareas que se ejercen tanto a nivel profesional como personal. Claro está es una decisión de cada familia o empresa determinar si interesan integrar a los robots humanoides en sus entornos. De lo que sí estoy segura es que cada vez se acerca más ese momento en que interactuemos con robots humanoides en diferentes espacios. ¡El tiempo nos dirá!
