En un paso trascendental para la infraestructura energética de Puerto Rico, el Negociado de Energía ha aprobado un conjunto de proyectos que añadirán 430MW de capacidad de almacenamiento eléctrico, capaces de suministrar energía hasta por cuatro horas consecutivas. Esta acción es parte integral de la transformación de la red eléctrica y marca un avance significativo en la marcha hacia la resiliencia y sostenibilidad energética.
La resolución emitida por el Negociado detalla la implementación de sistemas avanzados de almacenamiento de energía (BESS, por sus siglas en inglés) que ofrecerán servicios esenciales como la regulación de frecuencia y la reserva de energía, fundamentales para mantener la continuidad y fiabilidad del suministro eléctrico en la isla. Estos sistemas posibilitarán la integración de generación renovable y proporcionarán una capacidad de respuesta rápida frente a fluctuaciones imprevistas de demanda o generación, fortaleciendo así la estabilidad de la red ante eventos que puedan poner en riesgo el sistema de interconexión de la Autoridad.
El ingeniero y abogado Edison Avilés Deliz, presidente del Negociado, subrayó que “la incorporación de estos sistemas de almacenamiento eléctrico es un componente crítico para modernizar nuestra infraestructura y para alcanzar la meta de energía 100% renovable para el año 2050. Estos no solo mejorarán la calidad y confiabilidad del servicio eléctrico, sino que también representan un paso adelante en nuestra capacidad para manejar eficientemente la demanda de energía y reducir las emisiones contaminantes”.
Con una inversión estimada de $647,580,000, los proyectos abarcan desde la transmisión y distribución hasta las mejoras en la infraestructura de intercomunicación y son una parte crucial del esfuerzo por modernizar la red eléctrica de Puerto Rico. El Negociado ha solicitado a Genera PR presentar un alcance de trabajo detallado para cada sitio, asegurando así la transparencia y la eficacia en la ejecución de cada proyecto.
Estos sistemas también están diseñados para ofrecer servicios de generación distribuida y ayudar a mitigar los picos de demanda sin sobrecargar la red existente, maximizando la capacidad de inyección eléctrica disponible sin comprometer la integridad del sistema.
El Negociado reitera su compromiso con la supervisión y regulación de estos proyectos, garantizando su alineación con las políticas energéticas de Puerto Rico.
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